30 oct 2016

Nada.


¡Hola a todos!

Esta es la primera entrada que hago como parte de la iniciativa cadena de librosEl tema en esta ocasión fue el de impacto.

Al principio no sabía muy bien que libro recomendar porque libros impactantes, para mí, han sido varios. Desde clásicos como El señor de las moscas hasta recientes best sellers como Déjame entrar. Al final decidí recomendar un libro que leí hace tiempo y que considero impactante en muchos aspectos. Se trata de Nada, una novela corta, muchas veces catalogada como juvenil aunque a mi parecer es apta para cualquiera mayor de 15 años, escrita por la novelista danesa Janne Teller.


Cuando el colegial Pierre Antón descubre que la vida no tiene sentido, decide dejar la escuela y subirse a un árbol del que proclama nunca bajar y habla de los sin sentidos del mundo. Algunos de sus compañeros, conflictuados, deciden mostrarle que las cosas si tienen valor y sentido. Para ello, planean reunir objetos llenos de significado y mostrárselos a Pierre. Así es como empieza la trama de Nada, y conforme se avanza en la lectura, se va notando que aquel "juego de niños" se va tornando algo mucho más profundo y oscuro.

El libro es de lectura fácil, con un lenguaje bastante ameno, pero la trama me parece impresionante. Al principio puede parecer la historia como la de una fábula cualquiera, sin embargo, mientras más se avanza en la historia, se van planteando interrogantes como ¿Qué es importante? ¿Las cosas realmente tienen valor? ¿Qué somos? ¿Por qué existimos? El giro que van tomando los sucesos es sorprendente y a veces también angustiante.

Por otro lado,la autora lográ transmitirnos toda la ansiedad por la que pasan los protagonistas y el vacío existencial que padecen a tal grado que se sabe que el libro no pudo tener mejor nombre. En tanto, el texto hace una invitación a reflexionar sobre el sentido de las cosas y de la vida misma. Así como a cuestionar el funcionamiento de nuestra sociedad.

En resumen, Nada es un libro bastante impactante, quizá hasta crudo, pero que vale la pena leer. 

28 oct 2016

El árbol (cuento).

De Slawomir Mrozek.

Vivo en una casa no lejos de la carretera. Junto a esa carretera, a la entrada de la curva, crece un árbol.
  Cuando yo era niño, la carretera era aún un camino de tierra, es decir, polvorienta en verano, fangosa en primavera y en otoño, y en invierno cubierta de nieve igual que los campos. Ahora es de asfalto en todas las estaciones del año.
  Cuando yo era joven, por el camino pasaban carros de campesinos arrastrados por bueyes, y sólo entre la salida y la puesta de sol. Los conocía todos, porque eran de por aquí. Eran más raros los carros de caballos. Ahora los coches corren por la carretera de día y de noche. No conozco ninguno, aparecen de no se sabe dónde y desaparecen hacia no se sabe dónde.
  Sólo el árbol ha quedado igual, verde desde la primavera hasta el otoño. Crece en mi parcela.
  Recibí un escrito de la Autoridad. <<Existe el peligro - decía el escrito - de que un coche pueda chocar contra el árbol, ya que el árbol crece en la curva. Por lo tanto, hay que talarlo.>> 
  Me quedé preocupado. Tenían razón. Efectivamente, el árbol está junto a la curva, y cada vez hay más coches que cada vez corren más deprisa y sin prudencia. En cualquier momento puede chocar alguno contra el árbol. Así que cogí una escopeta de dos cañones, me senté bajo el árbol y, al ver acercarse al primero, disparé. Pero no acerté. Por eso me llevaron a juicio.
  Traté de explicar al tribunal que había fallado únicamente porque mi vista ya no es buena, pero que si me dieran unas gafas seguro que acertaba. No sirvió de nada.
  No hay justicia. Es verdad que un coche puede chocar contra el árbol y dañarlo.Pero sólo con que me dieran unas gafas y algo de munición, me quedaría sentado a vigilarlo. ¿Por qué tanta prisa por talar un árbol si hay otros métodos que pueden protegerlo de un accidente?
  Y no les costaría nada, aparte de la munición. ¿Acaso es un gasto excesivo?

Mrozer, S. (2003): El árbol, en El árbol (pp. 15-16)  España: Acantilado.
Traducción de: Bozena Zaboklicka y Francesc Miravitlles (1998).
El libro se publicó por primera vez en 1991.

Este texto pertenece a sus respectivos autores.
Compartido sin fines de lucro, sólo por el gusto de compartir. 

18 oct 2016

Mushishi.



Primero que nada, disculpen el retraso en los días. Cuando abrí el blog pensaba escribir una entrada cada quince días como mínimo y publicarla a inicios de semana, el domingo o el lunes. Aunque las cosas no han salido como lo planeé.

En esta ocasión vengo a recomendar un anime que se ha vuelto mi favorito, se trata de Mushishi: seinen del estudio Artland dirigido por Hiroshi Nagahama. Está basado en el manga homónimo de Yuki Urushibara.






¿De qué trata? 


Mushishi narra diversas historias del Japón feudal, donde los hechos acontecidos se relacionan con los mushi (bichos en japonés), que, en la serie, son seres que no son ni plantas ni animales (y por lo visto no pertenecen a ninguno de los cinco reinos) y, aparentemente, forman una conexión entre el mundo espiritual y el nuestro. Suelen no ser percibidos por las personas, pero gracias a sus características pueden influenciar en la vida diaria de las mismas, trayendo consecuencias tanto positivas como negativas. 

En todas las narraciones aparece Ginko (protagonista de la serie) quien es un mushishi, es decir, un experto en los mushi, y a lo largo de la serie investigará los acontecimientos relacionados con los mismos, e intentará ayudar a las personas que se vean afectadas.


¿Qué tan largo es el anime?


El anime se divide en dos temporadas. La primer temporada consta de 26 episodios y un especial. La segunda, titulada Mushishi: Next passage, consta de 20 episodios y otro especial. Cada capítulo narra una historia auto conclusiva cuya forma de narración recuerda mucho a la de una leyenda.

Al no haber una historia lineal, es posible ver los capítulos sin un orden específico, lo cual puede resultar beneficioso tomando en cuenta que es difícil encontrar la primer temporada completa, la segunda no tiene ese problema, pues actualmente es posible verla en Netflix o por el Crunchyroll.

Opinión (muy) personal.



El primer episodio que vi del anime fue El banquete en la montaña solitaria (al cual pertenece la imagen de arriba), capítulo primero de la segunda temporada, y me gustó mucho más de lo que esperaba. Si bien ya había oído hablar de Mushishi y de lo hermosos que eran el anime y el manga, no pensé que me gustará tanto, la razón, suelo tener gustos raros. Sin embargo, cuando empecé a ver el anime hubo dos cosas que me sorprendieron: una, no era violento (Si bien tiene ciertas escenas que sí lo son, a comparación de otros animes la violencia es menor); dos, la forma de narrar me recordó a aquellos cuentos fantásticos, y alguna que otra leyenda, que mi madre me contaba cuando era pequeña, lo cual me dio mucha alegría. No dudo que varios de los episodios estén basados en leyendas japonesas, aunque no lo he investigado. 

La manera en que la serie combina los elementos fantásticos con la vida cotidiana de las personas en el Japón feudal, se me hizo armoniosa, creíble y por lo mismo, fascinante. He de decir que con la serie yo quedé encantada, me gustó mucho y decidí compartir mi opinión y recomendarla.

Comentario (no tan personal).



Con una puntuación de 5 estrellas en Netflix y en Crunchyroll, y de 8.78 sobre 10 en MyAnimeList, y un sinfín de comentarios positivos, Mushishi es un anime bastante gustado por el público, y existen varios motivos para que lo sea: La forma en que es narrado dista de la que tienen la gran mayoría (o quizá el resto) de animes en el mercado. Retoma la fantasía y el misticismo de la tradición oral y los combina perfectamente con sucesos de la vida cotidiana e historias bastante introspectivas donde es posible explorar el comportamiento humano, incluso dando pie a que uno, como público, se pueda sentir identificado con la situación. Y qué decir de los detalles técnicos, la banda sonora y la animación son buenas, y cada episodio es atrapante sin necesidad de recurrir a escenas de acción y violencia extrema, lo que, a mi parecer, lo vuelve un muy buen anime y bastante recomendable.

Sinceramente, considero que Mushishi es un anime bello, que cualquier persona puede ver y disfrutar, y, además, si te gusta la cultura japonesa, es casi seguro que te encantará.

4 oct 2016

Las Flores del Cerezo.


Bienvenidos a mi primera entrada sobre una película. Empezaré advirtiendo que, muy probablemente, esta vez de un comentario muy personal sobre la cinta. Sin embargo, creo que dicha opinión puede ayudar a las personas comunes y corrientes a darse una idea sobre la película y decidir si quieren verla.


Siempre he creído que el cine alemán es uno de los mejores del mundo, y por el momento, ninguna de las películas que he visto lo desmiente, tal es el caso de Las flores del cerezo (Kirschblüten-Hanami). Cinta del 2008 dirigida por la alemana Doris Dörrie, nominada al Oso de Oro en el Festival de Berlín y ganadora en las categorías de Mejor Actor y Mejor Película en los Bavarian Film Awards.

Sinopsis.

 

Cuando a Trudi (Hannelore Elsner) se le informa que su marido Rudi (Elmar Wepper) está desahuciado, ella decide guardar el secreto e intenta convencerlo de viajar a Japón, país al cual Trudi está ligada, si bien no logra convencer a Rudi de ese viaje si consigue que él esté de acuerdo en visitar a sus hijos en Berlín. Tras su estancia no tan placentera en la capital alemana, la pareja va hacia el mar Báltico, lugar donde la historia da un giro totalmente inesperado que hará a Rudi emprender el viaje de su vida.







Opinión.

 

La película, a mi parecer, es hermosa. No solo porque trata sobre la pérdida de un ser querido y el conflicto y la soledad que conlleva ello sin caer en dramatismos innecesarios, sino porque es posible ver la unión de dos culturas, la japonesa y la alemana. Además de que la historia es un recordatorio de nuestra propia mortalidad y de esa necesidad de encontrarnos a nosotros mismos y a otros, a través de aquella metáfora que es el viaje. Siendo sincera esta cinta me ha gustado muchísimo.


Una cosa que me preocupaba mucho cuando la empecé a ver, es la manera en la que representarían a Japón dentro de la cinta, pues los cineastas occidentales son muy dados a filmar en países orientales, a hablar un poco de la filosofía e incluso hacer historias a lo “oriental” sin informarse adecuadamente y el trabajo termina siendo una visión bastante artificiosa y folclorista de cómo son las culturas orientales. Sin embargo, y para mi sorpresa, en Las flores del cerezo Dörrie nos brinda una visión bastante realista del país nipon. Por un lado, está la parte mágico-mística de Japón (que es la que a todo el mundo gusta) con bellas fotos del monte Fuji y las flores de cerezo, que en la película funcionan como la representación de la belleza y fugacidad de las cosas, pero también de su permanencia a un nivel espiritual. Por el otro, tenemos tomas de la enorme, moderna y caótica Tokyo, con grandes aglomeraciones extendiéndose por doquier, barrios bajos, bares, tiendas, y una vida bastante ajetreada. 


Un elemento muy importante en la película es la danza butoh, creada a finales de la segunda guerra mundial y como respuesta a la devastación que había dejado ésta. En la película, Trudi practicaba butoh y dicha danza aparece en muchas escenas del film y es mencionada en tantas otras.
Yo entendí que la danza butoh, dentro de la historia, era como una representación de la relación entre vida y muerte, y en ocasiones, la evocación de la muerte misma, aunque puede interpretarse de varias maneras.

Resumiendo, la película es una bonita reflexión sobre la pérdida de alguien especial, nuestra propia mortalidad y el ciclo de la vida misma, por tanto, la recomiendo ampliamente.

Para finalizar dejaré unos enlaces (una reseña y un análisis) hechas por gente que sabe mucho más que yo del tema.

Cine premiere:

Punto en línea: